Procedente del Pabellón Real del Alcázar de Jerez.
Arco polilobulado de yesería con decoración incisa pigmentada en rojo y negro.
Han sido restaurados cuarenta y nueve fragmentos de distintos tamaños y grosores procedentes de los distintos arcos que decoraban el Pabellón.
Las piezas estaban muy dañadas. De manera muy general se detectaron las siguientes patologías: rehidratación del yeso con deformaciones y oquedades, superficie pulverulenta y erosionada, adherencias de morteros modernos y suciedad.
En un primer momento se procedió a realizar la limpieza y la consolidación de cada pieza.
Después de realizar el estudio del tamaño y la forma de uno de los arcos, fueron seleccionados veinticuatro fragmentos para reconstruirlo. El montaje fue realizado sobre un soporte sintético y fijado a éste con elementos sustentantes de acero y fibra de vidrio. Una vez fijadas las piezas al soporte se procedió a la reconstrucción volumétrica combinando distintos materiales afines con el original y reversibles.