Parque de San Joaquín
Fue creado a comienzos de los años 90 para integrar los diferentes espacios abiertos que se disponían entre los Bloques de piso de la Zona. Por tanto, este Parque no cuenta todavía con árboles de gran tamaño, siendo lo más destacable de su fisonomía las abiertas praderas de césped entre las que llaman la atención, como especies de mayor desarrollo, olmos, algunas casuarinas y álamos piramidales, entre otros.
En su mayoría, el arbolado está integrado por ejemplares jóvenes, salvo algunos viejos almendros que debieron pertenecer a antiguas fincas de la zona. Como especies singulares destacan los sauzgatillos (presentes en pocos jardines de la Ciudad), los árboles del paraíso, un ejemplar de palo borracho reconocible por su tronco espinoso y varios pies de mimosas de oro.